Es un arbusto de hasta de 10 m de altura, muy ramificado, con tallos verdes, brillantes, volubles, trepadores y de crecimiento rápido en primavera. Las hojas son enteras, estrechas, lanceoladas, brillantes y dispuestas en verticilos de 3 o 4. Las flores, agrupadas en racimos terminales, son perfumadas, tienen cinco pétalos estrechos soldados en la base, formando un corto tubo y son suavemente anaranjadas con una mancha roja en la base de cada lóbulo; antes de abrirse, los lóbulos de los pétalos se disponen retorcidos. El fruto es un folículo dehiscente. Las semillas son pequeñas, ligeras y presentan un penacho de pelos blancos (vilano).
HÁBITAT Y DISTRIBUCIÓN :Vive en los márgenes de los bosques de hoja perenne en zonas de media montaña, hasta 1800 m de altitud, en la Región Oriental de Sudáfrica, desde El Cabo hasta Zimbabwe.
FLORACIÓN Y FRUCTIFICACIÓN :Florecen al principio de la primavera, durante algo menos de dos meses, quizás hasta mediados de mayo. Los frutos se abren en verano y las semillas son dispersadas por el viento.
CURIOSIDADES :Hoy en #UnaFinestraAlBotanic te mostramos una planta que no conocemos en otro jardín valenciano, pero que tiene gran interés ornamental por sus flores llamativas y la facilidad de su cultivo, solo hemos de pinzar los tallos para evitar que se nos escape trepando sobre otras plantas del jardín.
Como muchas otras apocináceas, esta especie segrega un látex tóxico al rasgar las hojas o los tallos que, en dosis altas, puede ser venenoso, lo que ha sido aprovechado para emponzoñar flechas y lanzas. Por ello, hemos de tener cuidado al tocarla y evitar llevarnos luego las manos a los ojos o a la boca. En dosis moderadas, se utiliza por sus propiedades cardiotónicas.
El nombre del género hace referencia a la forma retorcida de la flor antes de su apertura. Deriva de las palabras griegas strophos = cuerda retorcida; anthos = flor. El nombre específico significa vistoso, bonito.
Se reproduce fácilmente a partir de semillas sembradas en otoño o invierno, que germinan en 4-8 semanas; o mediante esquejes de madera dura, cortados en otoño o invierno, con un período de enraizamiento de 8 semanas.